Quitamos el adorno, las múltiples features online y nos centramos en la carne no en la salsa. Hace unos años haciendo esto, FIFA quedaba desnudo, sin contenido, vacío… Ahora todo lo contrario. FIFA 12 se reinventa partiendo de una base ya marcada por la excelencia. Y el ‘best seller’ de EA lo logra centrándose en pulir la experiencia de juego, en el fondo lo más importante en cualquier videojuego y sobretodo en los simuladores deportivos.
Pocos pensaban en el riesgo que ha tomado EA Sports al modificar completamente el sistema defensivo de la saga. Pero es que esto era justamente lo que necesitaba. Cualquier jugador más o menos hábil podía detectar que con mucha presión, al contraataque después de un posterior robo de pelota se podía marcar con relativa facilidad. Además, no era necesario contar con jugadores especialmente talentosos en lo defensivo para recuperar balones.
Ahora el sistema defensivo es mucho más real, la presión debe ser precisa, antes, como si de un ritual se tratara, el defensor debe perseguir y marcar a cierta distancia al atacante. Es algo que se debe experimentar y luego asimilar para entender el grado de realismo al que han llegado. Para nosotros con este punto logran subir un nuevo peldaño.
Lo restante es la salsa (Novedades FIFA 12). No es que carezca de interés, pero a nivel gráfico pocas novedades hay: sigue estando por encima de la competencia en lo general, menos en las representaciones faciales. La música sigue siendo agradable y los comentarios mejorables.
Destaca también el lavado de cara del interface y el ligero aumento de velocidad en el menú del modo carrera, aún un poco lento.
A nivel online, FIFA 12 presenta muchas novedades, pero destacaremos las centradas en crear comunidad, concretamente la iniciativa EA SPORTS Football Club, en la que millones de aficionados de todo el mundo han jurado lealtad a sus equipos favoritos a través de la opción “Apoya tu Club”.
En definitiva, volvemos a estar ante el mejor simulador del mercado porque no se duerme en los laureles y sigue evolucionando año tras año.